Águila culebrera sombría (Circaetus cinereus)
El águila culebrera sombría con denominación Circaetus cinereus es un águila africana de tamaño medio cuya dieta está basada principalmente en serpientes venenosas.
Características
Fiel a su nombre inglés “Brown Snake-Eagle”, el águila culebrera sombría es de un rico color marrón oscuro por todas las partes de su cuerpo. Sin embargo, este marrón se convierte en blanco en la parte interior de sus alas, solo visible en el momento en el que el ave está en vuelo.
Igualmente, este patrón de marrones cambia en una cola relativamente larga marcada con cuatro barras blanquecinas.
Seguidamente, y también en contraste con los tonos de sus plumas, destacan unos ojos brillantes de color amarillo a naranja. Además, posee un color grisáceo oscuro en ocasiones casi negro en el pico, cere y patas.
A diferencia de otros tipos de águilas, la catalogada como Circaetus cinereus tiene tarsos o patas con muchas escamas. Así, pueden sentirse a salvo de una posible mordedura de una serpiente venenosa.
La esperanza de vida de la culebrera sombría es de alrededor de unos 8 años.
Hábitat
El águila culebrera sombría vive en gran parte del África subsahariana, especialmente en Sudáfrica, Kenia, Namibia y Angola.
Además, su hábitat y nicho ecológico está repleto de bosques secos y sabanas espinosas de hojas anchas. Por ello y debido a su constitución, tiende a evitar los hábitats más áridos de estepa y pastizales.
La vida de la culebrera sombría es muy tranquila. En realidad, no destaca por ser una gran voladora, por lo que pasa mucho tiempo posada en grandes árboles o postes eléctricos.
Alimentación y caza
Como su denominación indica, la culebrera sombría come serpientes y culebras. De hecho, la alimentación de la subespecie Circaetus cinereus está especializada en cazar serpientes extremadamente venenosas.
Por ello, este águila culebrera se alimenta y caza cobras, víbora rinoceronte y la mamba verde oriental. No obstante, aunque muchas de las serpientes de las que se alimentan son venenosas, también se alimentan de otras especies de serpientes.
Además, en caso de no encontrar culebras, este pequeño águila se alimenta de pequeños insectos, roedores o pequeñas aves de su hábitat, al tener una fuerza muy superior a ellos.
Para cazar, el águila culebrera sombría se sitúa en un árbol alto donde puede divisar una gran parte de territorio a su alrededor. Así, aprovechando la muy desarrollada vista del águila, se lanza en picado una vez ve una presa susceptible de ser cazada.
Finalmente, la subespecie Circaetus cinereus saca sus garras para aterrizar sobre la serpiente y atraparla con sus fuertes pies y dedos antes de que pueda defenderse.
Y, una vez muerta, la coge con su pico y la engulle completa de una sola vez.
Cortejo
El cortejo de las águilas Circaetus cinereus se basa principalmente en la vocalización entre ellas. De hecho, este tipo de culebrera es muy silenciosa en su día a día y rara vez se le puede escuchar, a excepción de los momentos en que ataca a las serpientes.
Después, realizan pequeños vuelos entre sí para crear el vinculo de pareja. Aunque este acto es corto y simple ya que esta especie de águila no realiza piruetas ni grandes giros en el aire.
Nido
En cuanto a su nido, la culebrera marrón construye su nido con palos y ramas situadas a gran altura para mayor seguridad.
De hecho, al igual que el águila culebrera pechinegra con la que comparte hábitat, tienden a ocultar sus nidos en lugares con follaje denso como grupos de epífitas y árboles con grandes ramificaciones.
Aunque la hembra es quien se encarga en gran parte del cuidado de sus futuras crías, la pareja colabora en la construcción del nido de manera igualitaria.
En cuanto a tamaño, los nidos de la subespecie Circaetus cinereus tienen una anchura de hasta 70 cm con 25 cm de profundidad. Ciertamente, este águila no destaca por la construcción. Por eso, en caso de tener posibilidad, utiliza nidos abandonados de otras águilas como los del águila rapaz, o el águila azor africana.
Finalmente, para mayor comodidad previo al nacimiento de sus polluelos, los adultos cubren el nido con follaje verde y hojas frescas que son cambiadas regularmente cuando eclosionan los huevos.
Reproducción
En la reproducción de la catalogada Circaetus cinereus, la hembra solo pone un huevo. Además, el padre apenas se ocupa de cuidar el huevo, siendo la madre la que mantiene caliente al futuro aguilucho hasta su eclosión dos meses después.
No obstante, la labor del padre es esencial en el futuro de la pareja y el polluelo, ya que el macho se ocupa de cazar y traer suficiente comida para los dos. Después, tras el nacimiento del aguilucho culebrero sombrío, la pareja se turna para ir a traer comida suficiente para toda la familia mientras protegen a su pequeño.
Al nacer, el pequeño aguilucho tiene una coloración totalmente blanca. Después, a medida que crece, las plumas primarias así como su cabeza adquieren un color marrón claro con tonos rojizos previo a su plumaje final completamente marrón.
Tras algún tiempo alrededor de tres meses, el pequeño águila ya habrá alcanzado un tamaño considerable y comienza sus primeras pruebas de vuelo. Y, eventualmente, unas semanas después, superando los 4 meses se independiza para encontrar su propia pareja de vida.
Estado de conservación
La especie Circaetus cinereus correspondiente al águila culebrera sombría no está en peligro de extinción por lo que está clasificada como una especie de Preocupación menor.
Al igual que otras águilas africanas, como el águila marcial o la culebrera pechinegra, esta especie tiene un gran rango en el África subsahariana y está ampliamente extendida.
Las amenazas a las que se enfrenta este águila son la destrucción del hábitat debido a las nuevas construcciones modernas en África que están eliminando gran parte de la naturaleza del continente.